jueves, 30 de julio de 2020

¿Por qué nos enojamos?


¿Has estado alguna vez enojada con Dios como lo estuvo Jonás? ¿Te has airado en tu corazón a causa de algo que te ha parecido injusto?

"Entonces dijo Dios a Jonás: ¿Tanto te enojas por la calabacera? Y él respondió: Mucho me enojo, hasta la muerte."... (Jonás 4:9)

Sé honesta. Jonás pasó por un terrible tiempo de prueba. Estaba tan enojado, que sus palabras fueron "hasta la muerte".
Ese es un lugar muy peligroso pero una posición honesta que alguna vez, todas hemos tomado. Aprende a enfrentarte a tu enojo. Permanece en medio de la tempestad y pregúntate, ¿Por qué estoy tan enojada? ¿Qué es lo que me está presionando hasta llegar a este punto de perder el control? 
¿Es que esta situación justifica mi enojo, o debería ser más paciente y humilde?
Y por supuesto, efectúe también esta importante pregunta: Señor, ¿Qué estás tratando de mostrarme a través de todo esto?

No importa lo que pudo llevar a Jonás hasta este punto de desesperación, pero podemos entender su necesidad imperiosa de expresarlo. El enojo es una fuerza destructiva que afecta nuestro cuerpo. Úlceras, alta presión y problemas cardíacos son algunas de las consecuencias de una ira sin control.
La ira o el enojo frecuentemente contra objetos o personas (aún contra nosotras mismas), y así opera con su fuerza debilitadora.

El enojo debe ser analizado y canalizado en una fuerza positiva. El Señor Jesús puede decirnos cómo hemos de brindarnos a Él. ¡No tires ese plato al suelo, ni le pegues a tu niño sin razón! 
Querida Amiga, haz una oración, deja que el Espíritu de Dios enfríe tu ánimo y vuélvete a Dios. El está allí, a tu lado, y tiene en control todas las cosas.

.Patricia.


jueves, 23 de julio de 2020

En contacto con el Espíritu


Elías estaba acostumbrado a volar alto con el Señor.
El fue muy privilegiado en ascender a lugares elevados y experimentar un contacto estrecho y personal con el Espíritu Santo.

"... El Espíritu de Jehová te llevará..." ...(1° Reyes 18:122)

Elías fue llevado por el Espíritu de Dios porque andaba en Su perfecta voluntad.
Vivía y andaba siempre con Su Señor.
En estos días es mucho más posible el poder ser llevado por el Espíritu del Señor. La antigua profecía de Joel 2 que afirma que Dios derramará Su Espíritu sobre toda carne está cumpliéndose. Estamos viviendo días de avivamiento y restauración dentro de la iglesia de Cristo. La Palabra predicada bajo la unción del Espíritu Santo está siendo recibida y las almas son salvas en estos últimos días de la cosecha. Estamos siendo preparados para el pronto e inminente retorno de Cristo.

El hecho de que muchos cristianos no sean llevados por el Espíritu da a entender una falta de ejercicio en sus propios espíritus. ¿Cómo podemos abrir nuestros espíritus para contactarnos con el Espíritu Santo de Dios?

Querida Amiga, puedes empezar por tomar un tiempo a solas con el Señor decirle cuanto le amas. Luego puedes continuar hablando con Él  en una manera muy natural y personal. Alábale por todas las cosas maravillosas que ha creado y amale por ser Dios, pues no hay otro como Él.

A medida que continúes alabándole y adorándole, una marea de paz, gozo y amor inundará tu ser. Entonces sabrás que la adoración se traslada a las alturas espirituales del contacto con Dios. Recién entonces comenzarás a conocer verdaderamente a Dios.

.Patricia.





martes, 21 de julio de 2020

Un espíritu superior


Dios nos ha hecho a Su imagen. Así como él es Tres en Una Persona, nosotras también estamos compuestas de tres pares: cuerpo , alma y espíritu. Dios desea que seamos completas en cada una de estas tres áreas.

"Pero Daniel mismo era superior a estos sátrapas y gobernadores, porque había en él un espíritu superior"... 
(Daniel 6:3)

El ser, lisiadas en nuestra alma sería una expresión incompleta de nuestro Señor Jesucristo. Un espíritu reprimido no sería un buen testimonio del Dios Todopoderoso, y un cuerpo enfermo hablaría de un Dios que no sana o de una persona que no ha orado por su salud.

Daniel poseía un espíritu excelente; era extraordinario. 
Era como un libro abierto donde todos podían leer. El no hacía resaltar su ego (la vida del alma) tampoco abusaba de su cuerpo comiendo los manjares del rey. El Espíritu del Señor se reflejaba en el espíritu de Daniel.

En la vida de una mujer cristiana fiel puede verse a Cristo. 
Las personas se sentirán atraídas o repelidas hacia nosotras, según sea la condición de nuestro espíritu.
Los cristianos a menudo malinterpretan esta atracción espiritual y la pasan a una atracción de sus personalidades carnales. 
Y es allí precisamente donde empiezan los problemas.
Movimientos, organizaciones e iglesias completas han sido construidas sobre personalidades, pero una vez que dicha personalidad ha muerto o fracasado, ellas también han ido barranca abajo. Esto sucede cuando la vida del alma se ha extendido más allá del espíritu y el Señor Jesús queda oculto.

La verdadera atracción que otros poseen, es el Espíritu del Dios viviente. Ten cuidado Querida Amiga de no tomar la Gloria de Dios para ti misma, sino reconoce ser solamente un canal en Sus maravillosas manos.
Cuando tú le das la gloria a Él, el excelente Espíritu de Cristo se verá reflejado en tu vida, irradiando al mundo la maravillosa vida de Jesús.

.Patricia.




lunes, 20 de julio de 2020

Un Dios inmutable


¡Qué hecho maravilloso es que nuestro Dios nunca cambia! 
El ha hecho una obra tan perfecta en la creación, que tenemos abundante seguridad en el conocimiento de que sigue y seguirá reinando sobre ella.

"Porque Yo Jehová no cambio"  ... (Malaquías 3:6)

Dios nunca cambia en Su amor y compasión por nosotras. 
Su paciencia y su misericordia están basadas sólidamente en Su propio carácter invariable.

Podemos estar completamente seguras en el conocimiento de que nunca seremos separadas de Él.
De entre los millones de personas que pueblan este planeta, Dios te conoce de forma individual.
Él es inmutable y también lo es Su Palabra, pues es Su propia esencia.

¡Puedes Querida Amiga, darte cuenta que gran estímulo para nuestra fe resulta el conocimiento de estos hechos? 
La Palabra de Dios nunca cambia. Es tan viva como Aquel que la pronunció.
Esto significa que Dios todavía puede y quiere salvar, sanar y hacer milagros en favor de Sus hijas.
Significa que podemos confiar completamente en él,  buscarle y hallarle.

Las mujeres somos criaturas muy predispuestas a sufrir cambios. Siempre estamos vacilando entre nuestros pensamientos y nuestros sentimientos. A veces nos deprimimos y nos movemos entre el amor y el odio por nuestros esposos,  hijos y aún por nosotras mismas.
Un día estamos emocionalmente "arriba" y al día siguiente "abajo". Es por eso que necesitamos un Dios invariable.

¡Gracias, Padre mío, que Tú eres eterno, seguro e invariable, una verdadera ancla para mi alma necesitada y vacilante!

.Patricia.